Hace muchos años, vivía una princesa que era muy guapa. Su piel era muy blanca, sus labios muy rojos y una melena negra caía sobre sus hombros. Se llamaba Blancanieves.
Pero la reina, su madrastra, no la quería. Todos los días preguntaba a su espejo mágico:
-¿Quién es la más bella del reino?. Y el espejo respondía: -Blancanieves.
Y ella se enfadaba mucho.
Un día, la madrastra ordenó a un cazador que llevara a Blancanieves al bosque y la matara. El cazador la llevó y le dijo: -Vete de aquí y busca un refugio para esconderte.
Blancanieves, andando por el bosque, encontró una casita; llamó a la puerta y, como nadie respondía, decidió entrar.
En la casa todo era muy pequeñito. Había una mesa con siete sillas y una habitación con siete camitas. Como Blancanieves estaba muy cansada, se acostó y se quedó dormida.
Cuando llegó la noche, los dueños de la casa, que eran los siete enanitos, volvieron de trabajar y se quedaron muy sorprendidos de ver allí a aquella niña.
Cuando Blancanieves despertó y se encontró con los enanitos, llorando les contó su historia.
-No temas -le dijeron los enanitos-. Si quieres, puedes quedarte a vivir con nosotros.
Blancanieves fue muy feliz con los enanitos.
Un día, mientras los enanitos estaban trabajando y ella estaba sola en la casa, vino la madrastra disfrazada de viejecita con una cesta de manzanas envenenadas. Se las ofreció a la niña. Cuando Blancanieves mordió una, cayó desmayada al suelo. La vieja salió huyendo muy deprisa.
Cuando los enanitos regresaron del trabajo, encontraron a Blancanieves en el suelo.
-Blancanieves, Blancanieves – gritaban-, por favor, ¡despierta!.
Blancanieves no se movía. Los enanitos lloraban al ver que no despertaba.
Poco tiempo después, llegó un príncipe a caballo, se acercó y al ver a aquella niña tan guapa, le dio un beso. Blancanieves se despertó y se casó con el príncipe.
A la boda fueron los enanitos y todos los animales del bosque.
Y COLORÍN, COLORADO….
Este cuento les gusta mucho. Os dejo el video de las partes que más les gustan. Aunque cuando sale la bruja...
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